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Este vino es sinónimo de finura aromática y elegancia. Château Léoville Poyferré está situado al norte de la prestigiosa denominación Saint-Julien. Se creó en 1840 a raíz de las distintas divisiones de Domaine de Léoville y pasó a ser propiedad del Barón de Poyferré, que le añadió su nombre. Fue coronado Second Grand Cru Classé en la prestigiosa clasificación de 1855. La familia Cuvelier, comerciantes de vino, lo adquirió en 1920. Didier Cuvelier ha dirigido durante 40 años una reestructuración del viñedo respetuosa con el medio ambiente y el terruño. Su prima Sara Lecompte Cuvelier tomó las riendas en 2018.
El viñedo abarca 58 hectáreas de viñas, plantadas con un 61% de Cabernet Sauvignon, un 27% de Merlot, un 8% de Petit Verdot y un 4% de Cabernet Franc. Los vinos envejecen íntegramente en barricas de roble, el 80% de ellas nuevas, durante un periodo de 18 a 20 meses.
El Pavillon de Poyferré, Secel segundo vino de Domaine, se elabora principalmente con Merlot.
El Château Léoville Poyferré es un vino sublime, que ofrece mucha potencia y cuerpo sin perder su sutileza.
Reseña del vino por el crítico profesional J. Dunnuck con una puntuación de 100/100
"Esta belleza de color tinta ofrece esa rara mezcla de potencia y elegancia y ofrece amplio cassis y frutas azules variadas, riqueza con cuerpo, una sensación en boca opulenta, concentrada, pero perfectamente equilibrada, taninos aterciopelados y un montón de violetas clásicas de Saint-Julien, torrefactos de café expreso y mineralidad similar a la piedra triturada.
A pesar de su increíble concentración y profundidad, se mantiene maravillosamente equilibrado.
En una región en la que parece que sólo se habla de finura y elegancia, es un alivio que todavía haya productores como éste produciendo vinos potentes, intensos y singulares.
Me quito el sombrero ante la familia Cuvelier y su equipo."
Reseña de vinos del crítico profesional J. Leve "The Wine Cellar Insider" con una puntuación de 99/100
"Profundamente coloreado, el despliegue floral de la nariz mejora aún más al encontrar cerezas negras, grosellas, regaliz, hojas de tabaco, cassis y una variedad de especias.
El paladar ofrece capas de sedosas, frescas, puras y profundas bayas rojas.
El vino es denso, concentrado, dulce, maduro, fresco y pulido.
Hay una maravillosa sensación de pureza en la fruta.
Fácil de degustar, y aún más fácil de beber, el vino destila sensualidad y complejidad de principio a fin".
"Este vino es un vino de gran calidad
