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Obras maestras de vino y licores en su puerta
Château Croizet-Bages
El Château Croizet-Bages está situado en la aldea de Bages, en la localidad de Pauillac, en el corazón del Médoc. Fue fundado en el siglo XVII por los hermanos Croizet.
El Château Croizet-Bages será nombrado Quinto Grand Cru Classé durante la famosa clasificación de 1855 para la Exposición Universal de París.
Desde 1942, pertenece a la familia Quié, y hoy son Anne-Françoise y Jean-Philippe Quié quienes lo gobiernan con una pasión familiar que se ha mantenido intacta.
El Château Croizet-Bages cuida un viñedo de 26 hectáreas plantado sobre suelos profundos de grava y arena cascajosa, que incluye un 62% de Cabernet Sauvignon, un 28% de Merlot, un 6% de Cabernet Franc y un 4% de Petit Verdot. Los vinos envejecen durante 18 meses, de los cuales entre 12 y 14 meses en barricas de roble francés, con una proporción de madera nueva que oscila entre el 50 y el 55%.
La finca produce un Segundo vino, Alias de Croizet-Bages.
El Château Croizet-Bages ofrece vinos generosos, carnosos y concentrados, donde la pureza de la fruta se funde armoniosamente con los taninos y las especias, sello distintivo de los grandes vinos de Pauillac.
Notas de los críticos profesionales Château Croizet-Bages 2019.
Descripción Château Croizet-Bages 2019
Pauillacais en esencia, los vinos del Château Croizet-Bages son soleados y generosos.
Para perfeccionar las mezclas más delicadas, el Merlot, vendimiado relativamente temprano, aporta redondez al grand vin. Con notas de cereza confitada, expresa toda la pureza de una fruta crujiente y encantadora. El Petit verdot, presente en muy pequeñas cantidades, aporta al vino todo su ardor colorista. La columna vertebral de este gran vino, el Cabernet Sauvignon, por su parte, aporta un aroma potente y duradero que se revelará tras unos años de guarda. Con notas de fruta negra y cedro, la estructura tánica revela gordura, plenitud y generosidad.
Envejecidos de 12 a 14 meses en barricas de roble francés, los vinos son finos y de textura aterciopelada. Rico, profundo y elegante, Château Croizet-Bages abre horizontes aromáticos de ciruela, cacao, especias y cuero.